Los propietarios del nuevo MacBook Pro no sólo experimentan problemas de teclado y visualización, sino también problemas de software. Los usuarios informan de que el problema surgió después de la actualización a MacOS Mojave. Según ellos, los gráficos del ordenador se volvieron extremadamente inestables, lo que a veces causaba bloqueos inesperados y otros problemas con el sistema operativo.
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El problema se planteó por primera vez en octubre de 2018, y los propietarios del “problemático” MacBook Pro dicen que después de la actualización a la última versión, los problemas gráficos pueden producirse en un lugar completamente plano.
Tengo un MacBook Pro de 13 pulgadas (2018) y tengo problemas con los gráficos Intel Iris. Incluso las tareas gráficas simples pueden hacer que su ordenador cuelgue. La reproducción de vídeo se ha vuelto imposible, y va acompañada de un constante “tartamudeo”. Además, no puedo trabajar con Final Cut Pro X porque hay “artefactos” en la pantalla. Ese no fue el caso en High Sierra.
Otros usuarios también confirman la presencia del problema.
Cuando veo un vídeo a pantalla completa en Safari, la imagen puede estar distorsionada o incluso colgada. Tengo un MacBook Pro 15 (2018).
Aparentemente, el error se produce tanto en el MacBook Pro con gráficos integrados como discretos. Según los usuarios, una reinstalación completa del sistema no resuelve el problema, así como un restablecimiento del SMC y de la NVRAM/PVRAM. El diagnóstico interno tampoco revela ningún problema con los componentes internos del ordenador.
Mucha gente asume que el problema está en el software imperfecto, y para ser más precisos, en el MacOS Mojave. Los propietarios de computadoras con problemas enfatizan que tales problemas no estaban presentes en la Alta Sierra y en las versiones anteriores del sistema operativo.
Por cierto, el soporte técnico de Apple ha proporcionado una buena solución y sólo aconseja esperar a la próxima actualización importante del sistema 10.14.4.